sábado, 30 de septiembre de 2017

Cómo comprar originales de cómic sin que te estafen: El caso FRANK MILLER

A continuación traducimos un interesante post de Antonio di Biasio publicado en el grupo italiano de coleccionistas de originales de Facebook Collezionisti di Tavole Original:
:)

En un contexto histórico en el cual el coleccionista de páginas originales tiene un público cada vez mayor, creo que es necesario dar, a quien se acerca a este caro hobby, las herramientas necesarias para evitar elevar el número de estafas o adquirir, sin saberlo, gato por liebre.
A continuación algunos lineas generales para comprar con toda confianza e ir incrementando vuestra colección.
Se da por hecho que comprando en las diferentes webs y vendedores oficiales (dealers o representantes), se tiene la seguridad de que aquello que se lleva uno a casa. Sin embargo, muchos de nosotros buscan el "negocio" en plataformas de subastas online que no emiten certificados de autenticidad de la compra, por ejemplo, Ebay.
Así, en el momento en el que se pone la vista en un original que nos gusta o nos parece una buena compra, sería conveniente -siempre- seguir las siguientes investigaciones:

1. Comprobar la publicación, la cual es posible, para verificar los datos que aporten. Hay páginas webs (Marvel Wikia, DC Wikia, etc.) donde es posible comprobar los datos relacionados con el cómic que contiene ese página como el año, los autores, etc.
Una vez que estáis seguros que los datos se corresponden, sería oportuno comprobar que la página publicada corresponda con el original. Si no conseguís el álbum, hay inscripciones de pago, como Marvel Unlimited, que os permiten acceder a todos sus fondos y a descargárselo en versión digital. En vista de hacer una compra de varios cientos de euros, no seáis tacaños por unos euros.
Por otra parte, hay varias webs de subastas más acreditadas (Comic Link, Heritage, etc.), algunas de ellas tiene una buena base de datos de subastas anteriores y podéis comprobar que la imagen corresponda, si ha sido vendida aquí. En el caso de que estéis registrados, podréis ver también el precio de venta (obviamente sujeto a la revalorización del original con el tiempo).
Está también ComicArtFans, donde los coleccionistas de todo el mundo suben sus piezas. Si la página que vais a comprar ésta allí, podría ser que el vendedor sea el mismo coleccionista que la ha publicado. Si no lo es, preguntadle si por casualidad el original está todavía en su poder. Si es así, el original de esa subasta es falso o una copia.
Como última opción siempre está Google y la suerte de saber usarlo.



2. Una vez comprobada la publicación, haced comprobaciones del vendedor. A veces es suficiente leer los feedback. Si hay pocos o parecen poco fiables, preguntadle. Pedidle tal vez fotos detalle del original. Incluso por detrás del mismo. Hay vendedores que "reciclan" fotos de otras subastas sin llegar a tener ese original. Si todavía tenéis dudas, preguntad en foros. Existe la posibilidad que alguien os sople el original, es verdad, pero siempre será mejor que caer en una compra imprudente.


3. Si disponéis de buenas fotos, podréis saber mejor si se trata de una falsificación. La tinta habla, tiene una tridimensionalidad. Si lo que veis os parece diferente con lo ya verificado, pedid ayuda a un experto o aplazar la compra.


4. Si tenéis todavía dudas, pedid consejo a un experto. Uno de verdad, no a uno al que le guste ese autor porque tal vez os de un parecer equivocado. Recordad que ninguno os negará una consulta, pero no os escandalicéis si, por esta consulta se os pida una compensación económica. Como decía arriba, vedlo como parte de los gastos de la compra que estáis por hacer.


5. Si habéis seguido los puntos precedentes, tendríais que saber si se trata de un original de fiar o no. Si todavía tenéis algún regomello, intentad de contactar con el autor, si está vivo. Tened en cuenta que no todos son afables y dispuestos, y si no os responden será porque tienen sus motivos. Tened la certeza de que si le mostráis una falsificación, es más fácil que recibáis su respuesta.


Analicemos ahora un caso practico: En la foto se ve una porción de lo que parece una portada original de Frank Miller.
Aquí empieza la búsqueda y, normalmente, la parte que más nos gusta a los coleccionistas. Si se siguen los pasos vistos, se tardará poco en descubrir de qué se trata. Es decir, es una portada hecha por Frank Miller para una revista publicada en 1997 que contenía una entrevista al autor de Sin City y que fue subastada por Heritage en 2015 alcanzando 16730 dólares.


¿Y ahora? Ahora, antes de gastarse un euro, certificar que no sea una impresión, tal vez vendido en Ebay como "production art" o "transparent production", ya que Heritage deja en su web las imágenes en alta resolución y cualquiera puede descargarlas e imprimirlas en alta resolución. ¿Cómo se distingue eso? Tal como decía, el original es tridimensional, la tinta habla y, aunque sea una impresión de altísima calidad, ésta siempre será  bidimensional.
Se requiere un ojo entrenado para distinguir esto. En caso de dudas, pedid más fotos, incluyendo alguna por detrás para comprobar el papel, sellos, firmas o detalles que puedan avalar su autenticidad.



Si con esta fotos aún tenéis dudas, id a un buen oculista... eh... no, consultadlo con un experto y así evitáis molestar a Miller.
Una última puntualización relacionada con el precio: estudiad el mercado, comprobad precios similares en subastas. Si no os apetece o no tenéis tiempo, no habláis inglés, se pasa al punto 4 y pedid consejo a un experto. Y dado que hará de intermediario y hará un trabajo de investigación, no os alarméis si se os pide unos honorarios por ello. Si queréis conseguir determinadas piezas, tenéis que tenedlo presente. Y, por supuesto, el que una pieza esté firmada no determina su autenticidad.
;)

sábado, 23 de septiembre de 2017

Una tira falsa de MAFALDA por "Quilo"

Cada vez es más frecuente en este mundo del coleccionismo de originales encontrarse con casos de fraude. Bien sea porque le pagas a un avispado ladronzuelo por algo que nunca llegas a recibir, o bien porque habiéndole mandado un original a otro ladronzuelo, te bloquea el pago, lo reclama y pierdas tanto el original como el dinero. Y, por último, está el caso del gato por liebre. Es decir, originales que compras pero que no son originales, sino meras falsificaciones y, algunas de ellas, muy bien realizadas. Por ejemplo, esto último  nos lo encontramos con esta tira falsa de Mafalda de un autor "caliente", Quino.


Una tira supuestamente de este autor argentino -pagada al menos como tal-, y vendida por -atenciónIvan Barreriro, "supuesto" coleccionista argentino ligado también a falsificaciones de Hugo Pratt y al robo de los -estos sí- originales de Alberto Breccia, reclamados por la Interpol desde hace años.

Y ahora bien al pregunta de rigor: ¿cómo se combate con tanto timador y estafador? Pues tomando el mayor número de precauciones. Por ejemplo: comprando a otros coleccionistas con la que hayamos tenido ya trato y de confianza, a dealers o galeristas con experiencia y de fiar; contrastando información y referencias de esa persona a partir de otros coleccionistas o foros de coleccionismo; y, eso sí, a la hora de pagar, evitar Western Union , Money Gram y similares porque es imposible recuperar el dinero luego.

sábado, 16 de septiembre de 2017

Los coleccionistas de originales son gente excéntrica...

Sí, los coleccionistas -de lo que sea- son gente rara y cada uno tiene sus rarezas y manías. Sus gustos y preferencias. Y yo, sin duda alguna, yo no soy este tipo de coleccionista:


Jackie Chan: Ponga precio, se la compro.
Coleccionista (de arte): No me interesa el dinero. ¿Cree realmente que me interesa el dinero? Me interesa más adquirirlas que desprenderme de ellas. ¿Quizás podrían conseguirme las que me faltan?

Yo suelo "renovar" mi colección periódicamente y sustituir unas piezas por otras. Y este verano ha sido un momento de esos de renovación y redecoración...


NOTA: Diálogo extraído del filme "La armadura de dios" (1987)