jueves, 28 de noviembre de 2024

TRAN

José Luis Beltránhistorietista, pintor e ilustrador, a lo largo de su carrera usó diferentes seudónimos como Beltrán en sus inicios o Tranis en sus trabajos para publicidad y en el campo de la animación. Firmó también como Koski, Humberto Tran, aunque el más conocido es el de Tran a secas. Durante más de veinte años desarrolló su carrera profesional como dibujante de tebeos para la Editorial Bruguera. A partir de 1983 se dedicaría fundamentalmente a la pintura, faceta que cultivaría hasta su muerte en 2013.

Centrándonos en su labor como dibujante, comenzaría su colaboración con la todopoderosa Editorial Bruguera en 1960 con series como La familia Repanocha para Tío Vivo y, dos años más tarde, Ringo y Don Renato para DDT, a la vez que realizaba trabajos de animación para los Estudios Macián.

Cándido Palmatoria fue otro de los personajes creados por Tran en estos años. Su primera aparición tuvo lugar un 28 de agosto de 1967 (DDT nº7, Tercera Época). Cándido Palmatoria es un tipo delgaducho con gafas y de mediana estatura que viste siempre con sombrero y pajarita. Trabaja en una oficina para un jefe autoritario que le encarga quehaceres poco relacionados con sus funciones y luego termina echándole en cara no haber trabajado en lo suyo. Sus historias se volverían a publicar años más tarde -práctica muy habitual de la editorial- en Bruguelandia, Super DDT y Pulgarcito. Por último, una anécdota curiosa de esta serie es que Tran solía aparecer en muchas de de sus historietas, sino incluso protagonista o un personaje más de la historia.



 Original de Cándido Palmatoria, publicado en Pulgarcito nº2398 (29 de abril de 1968).
Original con sorpresa, por cierto, ya que al mirar al trasluz el original aparece el propio Tran se escondido en la tercera viñeta...

En la década de 1970 creó las series Constancio Plurilópez-probablemente su serie más conocida-, Tete Gutapercha o Fanny, todas ellas publicadas en las revistas Mortadelo o Super Mortadelo.

En 1977, con guión de Montse Vives, dibuja Purita, agencia matrimonial para la revista Christie, destinada a lectoras de la época. Purita se publicó en otras cabeceras como EstherLily, Súper Lily, Gina, Lily Especial o Lily Extra, y, de forma puntual, en revistas destinadas a todo tipo de lectores como en algún Mortadelo Especial.

Tran concibió a Purita como una chica guapa, rubia, grandes ojos oscuros y figura esbelta. El personaje, alejado de los clichés tradicionales, se movía por un mundo con cierto glamour pop y estética hippy. De este modo, Purita estaba al frente de una agencia matrimonial y tenía como ayudante a un joven botones, en una inversión de papeles dado que ella era la protagonista y la jefa.


Este original de Purita, agencia matrimonial apareció publicado en Lily nº 869 (julio de 1978). El guión de Montse Vives resulta simpático sin más, pero se compensa gráficamente con un trabajo muy cuidado por parte de Tran.

En 1982 Bruguera presenta una suspensión de pagos, punto de partida de los problemas económicos que la llevarían a desaparecer cuatro años más tarde. Todo esto lleva a que autores como Jan, Manuel Vázquez o el propio Tran abandonen la editorial, sumándose al proyecto de la revista Jauja de la Editorial Druida. Todos inician series nuevas en dicha publicación, en el caso de Tran, Gómez and Gómez, su última serie antes de cambiar los lápices por el pinceles.

También trabajó a través de la agencia Bardón Art para el mercado alemán con series como Klein y Hasi o para el danés con Josephine.

Sabido es que Bruguera no devolvía los originales a sus autores y sólo Francisco Ibáñez, en una posición siempre privilegiada, recuperó gran parte de ellos. Sin embargo, Tran reclamó también insistentemente sus originales, cediendo la editorial sólo algunos de ellos antes de que pasaran al fondo del Grupo ZETA. Hoy en día la familia vende parte de ellos a través de la plataforma Todocolección.

jueves, 17 de octubre de 2024

Originales de cómic en el MUDDI


En plena ruta de Serrablo, a medio camino entre Pamplona y Zaragoza, muy cerca de Jaca, se encuentra el Museo de Dibujo Julio Gavín. Este precioso, y prácticamente desconocido, museo se ubica en el Castillo de Larrés y desde 1986 acoge una vasta colección con un fondo de 5000 obras, dibujos que abarcan desde finales del siglo XIX hasta la actualidad.


Entre la obra expuesta, alrededor de 400, destacamos aquí las salas dedicadas a la ilustración, el dibujo de humor gráfico y, por supuesto, al cómic.

En la torre principal ,y tras una empinada y estrecha escalera de piedra, se llega a las salas XIII y XIV. En la primera, dedicada al humor gráfico, nos encontramos con una nutrida selección de piezas publicadas en La Codorniz, El Jueves o en prensa: Mingote, Oli, Perich, Peridis, Azagra, Gallego & Rey, El Roto, Gin, Forges, Ricardo y Nacho, etc.

En lo más alto de esta torre, la sala XIV, está dedicada a la historieta y donde nos deleitaremos con muestras De Francisco Ibáñez, José Escobar, Alfonso Font, Peñarroya, Vázquez, incluso exponen una preciosa portada de Martz Schmidt. Los autores del TBO están presentes también con páginas de Nit, Mestre, Urda, Cifre, Coll o Arturo Moreno.

Ni que decir que es de visita obligada a la salida del castillo, comer por la zona y seguir disfrutando de la zona, su entorno, y paisajes.






sábado, 10 de agosto de 2024

Ellos & Ellas: MIGUEL FERRER meets FRANK MILLER & JACK KIRBY

 


De izquierda a derecha: Miguel Ferrer, Jack Kirby, Frank Miller y Bill Mumy.

Y aunque Ferrer y Miller coincidieran en el rodaje de la mítica Robocop (1987), esta imagen correspondería a unos años más tarde, principios de la década de 1990. Probablemente al año 1992 cuando se editó The Art of Jack Kirby, publicación que lleva en sus manos El Rey. Por esa época el actor Bill Mumy había participado en la primera película de El Capitán América, basada en un personaje co-creado por Kirby, y en las series también superheróicas para televisión de Flash y Superboy, además de haber co-creado para Marvel, junto a Ferrer, el personaje Comet Man -con portadas de ¡¡Bill Sienkiewicz!!-.

jueves, 18 de julio de 2024

El precio de una obra maestra


Galerista: Bien, esa es su obra maestra. Me duele perderla.

Mujer coleccionista: Por 10.000$ no creo que le duela tanto.

Galerista: Jejeje jeje

PERVERSIDAD (Fritz Lang, 1945)

viernes, 31 de mayo de 2024

El hombre que reía

Podemos decir -cayendo en el error fácil- que la primera vez que se publicó algo de Berni Wrightson en España fue gracias a Toutain. Y efectivamente,... ¡¡no es cierto!! Basta tirar un poco, sólo un poco, de hemeroteca y comprobamos que ya en 1970 la Editorial Novaro había publicado una historia corta, o que tanto Ediciones Vértice como Nueva Frontera (Totem Extra#16 Especial USA) publicarían antes diferente material firmado por Wrightson. Pero, seamos justos, al de Baltimore lo conocemos fundamentalmente gracias a que Toutain publicara en 1981 Wrightson Maestro del Terror. Y luego, ya en la década de 1990 las obras completas -en tres números-, Feria de Monstruos, Creepshow o La Cosa del Pantano.

En esta primera recopilación monográfica encontrábamos ya algunos de los que serán sus mejores trabajos. Basta nombrar algunos de ellos: Jenifer -una auténtica joya-, El gato negro -ni el propio Richard Corben adaptaría mejor a Edgar Allan Poe-, El monstruo de Pepper Lake -¡tremendo final twist!-, El despertar de la muerte -antecedente de lo que haría luego ilustrando Frankenstein- o El hombre que reía -¡otro final twist!-.

En esta última historia, como en todas aquellas en las que ha experimentado con aguadas de tinta, el resultado final de impresión nunca le ha hecho justicia. El hombre que reía se ha reeditado en tres ocasiones: la primera, la citada Wrightson Maestro del Terror; en 1992 en Berni Wrightson Obras Completas #1 (Toutain Editor); y, por último, en 2013 en Creepy presenta Bernie Wrightson (Planeta DeAgostini). ¿Cómo? ¿Qué? Ah, que la historia de El hombre que reía se publicó también en la revista Dossier Negro nº 112 (sept. 1978). Apuntado queda, gracias.

Sea como sea -os lo aseguro-, jamás se ha editado recogiendo la riqueza de sus aguadas, la belleza de su trazo o la luminosidad y textura de sus formas. Jamás se ha editado con la calidad que merece el exquisito trabajo de aguadas de Wrightson en esta historia. ¿No me creen? Gente incrédula... Buscad alguna de las publicaciones nombradas donde se ha recogido El hombre que reía, comparad cómo se ha publicado, por ejemplo, esta viñeta y busquen las diferencias...

Detalle de la tercera página de The Laughing Man, publicada originalmente en Creepy #95 (Warren, 1978)

Por desgracia, visto lo visto, tan sólo pueden valorar adecuadamente este soberbio trabajo aquellos afortunados coleccionistas que poseen alguna de sus seis páginas originales. No hay ningún artist edition que la recopile, aunque vosotros -oh, afortunados lectores de este blog- podéis deleitaros viéndola fielmente reproducida aquí.

domingo, 12 de mayo de 2024

Sinatra vs. Lobezno

En el arte por extensión, y en cómic en concreto, las referencias y la documentación fotográfica es fundamental y bastante habitual. Pero habría que huir de las imágenes "fáciles", reconocibles de identificar, salvo que haya un mensaje connotativo detrás. En este caso, estoy seguro que es intencionada la referencia y hay cierta ironía, y más viniendo de Frank Miller...


Portada del álbum “Come Dance With Me” de Frank Sinatra y portada de Wolverine Limited Series #1 por Frank Miller y Joe Rubinstein.

Precisamente John Romita Jr. acaba de homenajear esta portada en From The Ashes: Wolverine #01 USA, título que no podremos disfrutar hasta después del verano.

jueves, 11 de abril de 2024

La lenta y gradual muerte de El Capitán Marvel

Allá por 1983 Cómics Forum arriesgaba con una nueva colección de tapa dura y de precio casi prohibitivo. Y aunque solo tuvo siete entregas, marcaría un antes y después, creo, rompiendo esquemas a la hora de publicar material Marvel en España. Y casi de cualquier otro tipo de material tebeístico. Hablo de las Novelas Gráficas Marvel, cuyo primer número publicado fue "X-Men: Dios ama, el hombre mata".

Su segundo número, un año después, fue el que iniciara esta colección en los USA: "La muerte del Capitán Marvel". Luego se sucederían otros títulos, pero ninguno a la altura de estos dos primeros publicado en España. El tremendo impacto que tuvo la novela gráfica del Capitán Marvel, al menos para mí, es aún duradera e indescriptible. Nostalgia y calidad, calidad y nostalgia a partes iguales y por partida doble, se mezclan en esta cósmica historia.

Y eso intenta siempre aunar todo buen coleccionista. Probablemente sea uno de los mejores trabajos salidos de la Casa de las Ideas y, sin duda alguna, está en mi TOP 5 de los mejores trabajos de Marvel.

Por eso soy un tipo tremendamente afortunado por poseer un pedazo de su historia. Aunque esta historia como la de Mar-Vell, hijo del Imperio Kree, esté condenada a desvanecerse poco a poco y a desaparecer del todo con el tiempo. Así, Jim Starlin consiguió el más difícil todavía. Al mismo tiempo hizo lo mejor y lo peor en este trabajo. La desafortunada decisión de entintar con unos rotuladores de muy poca calidad, y gran cantidad de alcohol, conducirá a que el dibujo deje de existir en unas décadas. Manteniendo el original a oscuras y sepultado en una carpeta libre de ácido será un bonito cadáver al menos que contemplar durante algunos años más...


The Death of Captain Marvel Pg. 30 en mi colección de CAF

jueves, 4 de abril de 2024

Ellos & Ellas: FRANCISCO IBÁÑEZ

Hoy sale a la venta París 2024, el álbum de Mortadelo y Filemón en el que estaba trabajando el maestro cuando nos dejó el pasado verano.


Francisco Ibáñez (1936-2023)

jueves, 28 de marzo de 2024

LONGARON y Friday Foster, la heroína inesperada

El amigo Javier Mesón nos habla de esta exposición en Barcelona. ¡¡¡Visita obligada, oiga!!! Hasta el 24 de junio de este 2024 en el MNAC.

lunes, 18 de marzo de 2024

El día que MARVEL convirtió a Manolete en supervillano

En Daredevil #5 USA (diciembre de 1964) haría su primera aparición El Matador, villano inspirado probablemente en alguno de los toreros más famosos de la época. Por ejemplo, en el torero mejicano Carlos Arruza, cuya fama le llevó incluso a interpretar en 1960 un papel en la película "El Álamo", dirigida por el mismísimo John Ford. Arruza falleció el 20 de mayo de 1966 en un accidente de tráfico.
Aunque si partimos de la información que aparece en el cómic y que "durante años, Eloganto fue el torero más famoso y controvertido de España", tendríamos que poner nuestra pista sobre toreros españoles. Y de todos los toreros famosos españoles de la época, Juan Belmonte (1892-1962) es considerado el padre del toreo moderno y el más relevante de la edad de oro del toreo, heredero de la revolución que supuso años atrás José Gómez "Joselito". Además de por sus dotes para la tauromaquia, Belmonte, amante de la lectura y con una gran sabiduría, fue conocido por relacionarse con personalidades de la cultura como Valle-Inclán, Gerardo Diego o el escritor norteamericano Ernest Hemingway.

Otra posibilidad podría ser la de haberse inspirado también en otra leyenda dentro de la tauromaquia como es Manolete (1917-1947). De hecho hay cierto parecido entre los nombres de El Matador, Manuel Eloganto, y el de nacimiento de Manolete, Manuel Laureano. Y aunque Manolete sea un torero anterior y pertenezca a la década de 1940, su fama es internacional y aún está muy arraigada, apareciendo su nombre en producciones norteamericanas actuales. Por ejemplo, en "Toy Story 3" (2010) o en la serie de televisión "The Blacklist" (2013-2023), por no mencionar la película "Manolete" (2007), con Adrien Brody en el papel del torero.

Vistos todos los nombres seleccionados, hagamos una rueda de reconocimiento y comparemos el parecido de El Matador con los matadores citados.


Manolete y Carlos Arruza


Juan Belmonte

Manuel Laureano "El Matador"

Sin embargo, 
ninguno de nuestros toreros seleccionados lleva con su traje de luces la chorrera decimonónica de El Matador. Habría que remitirse a la época de toreros como Costillares Pedro Romero, este último retratado por Francisco de Goya en 1795. Retrato que, por cierto, pertenece al Museo de Arte Kimbell de Estados Unidos.