Ali Oli, vendedor oriental... By ¿VÁZQUEZ?

Ali-Oli, vendedor oriental, fue una serie que creó Manuel Vázquez en 1968 para la revista Tío Vivo. La realizó durante varios años y de forma muy esporádica y de la cual existen muchas páginas apócrifas.

Estamos en el momento de mayor producción de Vázquez -finales de los 60 y principios de los 70- y su presencia se hace clave en la nueva revista Gran Pulgarcito, para la que crea tres nuevos personajes: Don Polillo, La abuelita Paz y Feliciano. Al mismo tiempo sigue trabajando para la editorial Bruguera realizando anuncios publcitarios, secciones de chistes, algunas nueveas entregas de Las Hermanas Gilda, La familia Cebolleta, Angelito, Ali-Oli, Los casos del inspector O´jal o Los cuentos del tío Vázquez, amén por supuesto, de Anacleto, agente secreto.

Sin embargo, esta etapa de máxima producción empieza a decaer cuando, en 1971, tanto La abuelita Paz como Anacleto son ya realizadas por un equipo de creadores sin firma, comandados por Blas Sanchís y un año después Bruguera empieza la reedición y remontaje de viejas historias de Vázquez, recortando viñetas, redibujando fondos y bocadillos y volviendo a rotular esta vez con letra de imprenta todos lo diálogos. Esto no quiere decir que no volviera a dibujar en estos años nuevas entregas de sus personajes más famosos, Anacleto y Las Hermanas Gilda, o de otros no tanto, Angelito y Ali-Oli.

Sea como sea, entre 1973 y 1977, sus páginas originales aparecen con cuentagotas. Y casi desaparecen del todo hasta que en 1978 Vázquez comienza una nueva andadura artística enfocada más al mundo del humor para adulto, ya sea en revistas como Can Can, Hara Kiri, El Cuervo o el semanario El Papus.

Esta historieta de Ali-Oli, vendedor oriental está fechada en 1972. Esta serie, además de aparecer en Tío Vivo, fue publicada en otras revistas como Gran Pulgarcito o Super Mortadelo. Esta historieta en concreto apareció en Super Mortadelo Nº7 (1972) y llega la pregunta que todo el mundo estaba esperando: ¿es original de Vázquez o un apócrifo? Bueno, como me comentó Antoni Guiral cuando le consulté la autoría. En opinión de este teórico y estudioso del tebeo español en general, y de la Escuela Bruguera en particular, sí, se trata de una historia original de Vázquez. ¿Por qué? Bueno, según Guiral encontramos en esta historia el humor y el trazo característico de Vázquez; la firma "by" -hubo un época en que la firma "by" era el único dato por el que podía reconocerse que aquel trabajo era de Vázquez-; el hecho de que no haya viñetas recortadas y/o remontadas o huella de diálogos reescritos ayuda a pensar que sea 100% suyo.
Claro que sólo el propio Vázquez podría contestar con total y absoluta certeza.

Portada de la revista donde apareció publicada en 1972. Y, tal como solía hacer Bruguera, esta historia volvería a ser publicada en los 80. Probablemente a color. A próposito de esta portada, ¿se han dado cuenta ustedes de que se trata de una apócrifa de Ibáñez?

Los originales tal como aparecieron publicados. En la parte posterior de los mismos aparece escrita la nota "bicolor", entendiéndose ahora a qué se refiere.

Nota: Gracias a Antoni y a José por sus aportaciones. Sobre todo a Antoni del que he fusilado el texto de esta entrada de su libro "By Vázquez - 80 años del nacimiento de un mito" (Ediciones B, 2010). Y gracias también a Enrique por su amistad.